Mucha gente es reacia a visitar cementerios. La verdad es que, bromas aparte, son lugares tranquilos, que suelen estarr muy cuidados y que muchas veces albergan importantes obras de arte. En lo que se refiere a este camposanto, situado en la parte alta de Mataró en los terrenos de lo que fue un antiguo convento de capuchinos, puedo asegurar que bien vale una visita por su calidad paisajística (espléndidas vistas sobre un luminoso Medoterráneo) y por su legado arquitectónico. Se trata de un recinto de respetables dimensiones, muy cuidado y que me llamó la atención por su amplitud. No llegaré a decir que me gustaría pasar a residir aquí, pero, desde luego, los he visto muchísimo peores... Se encuentra en la ladera de la colina que domina la población, y, si en la parte superior, dominan los espacios abiertos, es la inferior donde se agrupa un conjunto monumental nada despreciable. El atrio de entrada, en forma de mini-Panteón es muy llamativo.
A MI ME GUSTAN LAS HISTORIAS QUE ALBERGAN LOS CEMENTERIOS, EN BUENOS AIRES TENEMOS LA RECOLETA, UN LUGAR CON MUCHA HISTORIA Y RELATOS ESTREMECEDORES.
ResponderEliminarYO VOY SIEMPRE A VER A MI MADRE, IGUAL ME VOY RÁPIDO PORQUE ESE HALO DE SOLEDAD ME HACE MAL.
BESOS
Tienes razón Amparo, el cementerio de Les Capuxines está lleno de obras de arte, no tiene nada que ver con el nuevo de Les Valls, donde todo es muy frío y sin personalidad.Mi padre está en el nuevo.
ResponderEliminarAbrazos
Amparo, aunque no me guste mucho visitar el cementerio porque me produce mucha tristeza pues tengo familia en los dos, es mucho más bonito el de Les Caputxins a pesar de que por algunas de sus calles me da repelús pasar, cosa que no me pasa en el de Les Valls.
ResponderEliminarUn abrazo